Preguntas frecuentes sobre las muelas del juicio
La erupción de las muelas del juicio es un proceso en general molesto. Pero, ¿Siempre hay que extraerlas? ¿Duelen mucho? Respondemos las preguntas más frecuentes sobre el desarrollo de los terceros molares.
Las muelas del juicio o terceros molares provocan un dolor intenso que suele aparecer de un día para otro. En general se desarrollan a partir de los 18 años, aunque cada paciente es distinto y su desarrollo puede variar mucho en función de cada caso. De hecho, algunos pacientes no llegan a desarrollarlas nunca. Todo el proceso genera varias dudas entre los pacientes; te respondemos las más frecuentes.
Preguntas frecuentes sobre las muelas del juicio
El desarrollo de las muelas del juicio ha generado todo tipo de mitos y preguntas:
1. ¿Cuáles son los síntomas de su desarrollo? ¿Siempre duelen?
Cada paciente es distinto y en muchos casos las muelas del juicio se desarrollan sin grandes molestias. Pero una clara señal de su desarrollo puede ser el dolor, la infección o la inflamación de la zona que rodea el molar. En estos casos se recomienda acudir al dentista de confianza cuanto antes. Mediante una radiografía dental, se podrá apreciar la posición exacta del molar y se valorará la necesidad de extraerlo.
2. ¿Siempre es necesario extraer las muelas del juicio?
No, de hecho muchos pacientes las desarrollan sin mayor complicación. El problema llega cuando las muelas del juicio afectan otras piezas o pueden alterar el bienestar del paciente. Estos son algunos casos:
- Posición defectuosa. Si las muelas del juicio salen torcidas, pueden alterar la posición de otros dientes, algo especialmente grave si hemos llevado ortodoncia.
- Muelas semiincluidas. Cuando los terceros molares no terminan de erupcionar quedan parcialmente cubiertas por las encías.
3. ¿Cómo es el proceso de extraer las muelas del juicio?
Como el de cualquier otra exodoncia, proceso por el que conocemos la extracción dental. En primer lugar aplicamos anestesia local y en función de si el molar se ha desarrollado o no, se interviene quirúrgicamente la encía para extraerlo. El proceso es indoloro, pero después de los efectos de la anestesia el paciente suele experimentar un dolor agudo e inflamación en la zona intervenida.
4. ¿Qué cuidados hay que mantener después de la extracción?
En caso de sangrado, se recomienda aplicar una gasa húmeda hasta que cese. Durante los primeros días hay varias pautas a seguir: para rebajar el dolor, se aconseja tomar antiinflamatorios y aplicar hielo. En estas primeras horas se aconseja reposar y seguir una dieta blanda, ya que el esfuerzo en la mandíbula provoca dolor y puede alargar la recuperación. Si el dolor persiste o se vuelve muy insoportable, se recomienda acudir al dentista de confianza cuanto antes.
Autor
Autor del texto: Dr Dario Vieira Pereira
Licenciado en odontología. Se ha especializado con el Máster en Cirugía e implantología por la Universidad de Barcelona, y completó su formación con el Diploma de Estudios Avanzados en la Facultad de Odontología de la misma Universidad. Licenciado en Odontologia 1996-2001 Master de cirugía bucal e implantología bucofacial, Facultad de odontología, Universidad de Barcelona 2001-2004 Diploma de estudios avanzados del Doctorado con clasificación de excelente 2006.